martes, 22 de abril de 2014

Hinduismo básico, contado por un Hindú.

En este post trataremos los rasgos más sobresalientes del hinduismo, a fin de ampliar nuestro conocimiento de las raices profundas y de la perspectiva histórica en las que nacieron las ciencias aquí tratadas. Por supuesto existen textos mucho mas "científicos", pero   este artículo sacado de la Red puede resultar ilustrador por que es  un hidú el que nos cuenta  que es el hinduismo.



En la India existen muchas corrientes hinduistas o caminos de Dharma, término que significa "religion", "orden". Algunas de éstas son teístas y otras no. Algunas otorgan una personalidad antropomórfica a Dios y otros lo consideran como un principio que impregna todo el universo, una fuerza inmaterial llamada Brahman.

Dependiendo de la ubicación geográfica en India podemos encontrar una mayor presencia de devotos de ciertas corrientes y otros lugares de otras. Muchas veces se suelen adorar triadas de Dioses o, mas correctamente, una "trinidad". La más importante es: Brahma-Visnu-Siva (no confundir Bramha con Bramhan). Quienes consideran que Visnu, controlador del universo, es el Dios supremo son llamados Vaisnavas o Vaisnavistas, quienes consideran a Siva, destructor del universo, como Dios supremo son Sivaistas; Brahma, creador del universo, no es considerado ni adorado como Dios supremo ya que fue el primer ser creado por Dios.

Esta trinidad, que si bien se caracteriza por tener 3 Dioses bien diferenciados, con caracteristicas, historias, rezos, altares e incluso templos distintos, en realidad es la representación de algunos de los atributos más importantes de Dios: Creador, Controlador y Destructor del universo. [Notese la similitud con la trinidad contemplada en la tradición cristiana apostolica romana] Esta misma multiplicidad puede extrapolarse hasta completar el vasto y complejo panteon hindu, que cuenta con mas 30.000.000 de Dioses; desde Agni, dios del fuego, Indra, dios de la lluvia, y asi tambien los distintos gobernantes de los planetas celestiales y los astros. Todos ellos representan la multiplicidad y perfección de Dios.
Entonces el hinduismo, o por lo menos, la gran mayoria de las corrientes hindues, pueden considerarse como monoteistas. A pesar de que cuesta entender esto ya que adoramos a multiples imagenes que representan los multiples atributos de Dios. 

Es gracias a la adoración de las imagenes y estatuas que los devotos pueden comunicarse de forma rapida y directa con Dios. Se considera que Dios desciende al mundo en forma humana, avatar, para propagar su mensaje y enseñanza, al tiempo para satisfacer a sus devotos y redimir a los impíos. La primera y mas profunda forma de comunicación con Dios, de acuerdo a la escuela Vaisnava Gaudiya, es la plegaria y el canto de los Santos Nombres de Dios . El canto continuo, con devoción, mantras, respeto y amor purifica el alma de la persona, abre sus sentidos, aquieta la mente y puede percibir a Dios de una forma mas latente y asi entrar en Comunión con Él.

En el hinduismo no hay una figura politico-religosa máxima, como lo es el Papa para el Cristianismo. Pero si hay maestros espirituales, gurus, a quien el devoto solicita sus enseñanzas y consejo espiritual para el perfeccionamiento personal en todos los niveles posibles, ya sea espiritual, mental y corporal. Los maestros espirituales en el Vaisnavismo Gaudiya son hombres profesionales de titulo universitario que aplican sus conocimientos en pos del entendimiento de la obra divina, asi hay gurus filósofos, psicólogos, teólogos, sociólogos, medicos, quimicos, fisicos, etc. Ni hablar del intenso estudio que deben realizar de las sagradas escrituras.

Las escrituras sagradas de la India se pueden dividir en dos grupos: Shruti, lo "revelado", y Smriti, lo "relatado". Dentro de las obras reveladas estan los famosos Vedas, Veda significa conocimiento, que son: Rig-Veda, Atharva-Veda, Sama-Veda y Iayur-Veda, que a su vez se dividen en Samhita (himnos), Bramhana (rituales), Arianaka (interpretaciones) y Vedanta que son los Upanishads. Estos textos shruti son revelados divinamente por Dios y se lo comunicó a muchos sabios y profetas de diversos lugares del mundo y en tiempos distintos [Explicación de la diversidad de religiones]. Los textos smriti son textos relatados, de gran contenido historico, donde se entremezcla mitologia, tradicion, enseñanza, etc; los principales son: Mahabharata, la epopeya de India (mas amplia que la Iliada, la Odisea y la Eneida juntas), y el Ramayana, que narra la vida de un gran Rey desterrado llamado Ramachandra, considerado como una encarnación (avatar) de Visnu.

En el hinduismo se dice que todo ser vivo busca y debe buscar: Kama, o placer e incluye el placer sensorial, sexual, etc; Artha, o bien material, dinero, casa, auto, etc; Dharma, o religion, orden, rectitud y finalmente Moksa, o liberación. Dependiendo de que es lo que mas busca una persona en la vida así será el conjunto de sus acciones, e importantes serán las intensiones de dicha persona para conseguir lo que desea.
Para cerrar, en el Vaisnavismo Gaudiya se considera que la naturaleza del hombre y la perfección de la existencia es a través del servicio a Dios, a la humanidad, a los demás seres vivos y al planeta. Ser devoto implica ser consciente de Dios, obrar bien, trabajar honestamente, respetar a los seres vivos, respetar y honrar a los familiares y amigos, y la lista sigue...

Con respecto a la " sacralización de las vacas" puedo decir que las consideramos un animal sagrado el cual no debe matarse, sino mas bien cuidar y respetar. No consideramos que nuestra madre sea una vaca, pues si lo hicieramos nuestras madres se enfadarían muchisimo!! Si no que consideramos a las vaca como nuestra segunda madre, ya que luego de la leche materna nos seguimos nutriendo con la leche vacuna (Aunque en otros paises se beba leche cabra, buey, yak u otros bovidos). Tambien una explicación utilitarista que podria explicar la divinificación de la vaca; imaginemos India, un pais tan rico y fértil que con tirar piedras al aire obtenemos cantidad de plantas, frutos, flores y semillas aromáticas, la vaca que nos entrega la leche y que a partir de ella obtenemos varios derivados como yogur, ricota, manteca, crema, etc. hacia innecesario la ingesta de carne; y ademas con nocion de la que la vaca ayudaba a la limpieza y fertilizacion de los campos y en el arado podria haber generado una idea de que la Vaca valía mas viva que muerta [Explicación posible del vegetarianismo hindu].

domingo, 13 de abril de 2014

Las técnicas de meditación y relajación llegan a las aulas.


Los expertos dicen que, cada día, todos deberíamos pararnos un momento, quedarnos en silencio y respirar bien para disminuir el estrés, la agitación y el malestar. Los beneficios que nos pueden reportar las técnicas de relajación son muchos; también, en el ámbito educativo. Coloquio entre Luis López González, especialista en educación emocional; Berta Meneses, química, religiosa filipense y maestra Zen; yJoaquina Fernández, experta en comunicación no verbal e inteligencia emocional, preside el Instituto Humanidades y Negocios de la Universidad de Alcalá de Henares.


viernes, 11 de abril de 2014

Que es el vipassana, la respiración consciente .

El sistema de meditación de Buda era el vipassana. Vipassana significa ser testigo y es uno de los mejores métodos, el método de observar tu respiración… simplemente, observar tu respiración.
Respirar es un fenómeno tan simple y natural y se realiza veinticuatro horas al día. No tienes que hacer ningún esfuerzo. Si repites un mantra, tendrás que hacer algún esfuerzo, tendrás que forzarte. Si dices: «Rama, Rama, Rama», tendrás que esforzarte continua­mente. Y muchas veces te olvidarás. Además, la palabra «Rama» también pertenece a la mente y nada que sea de la mente puede llevarte más allá de la mente.
Buda descubrió un método completamente diferente. Basta con observar tu respiración… el aliento que entra, el aliento que sale.
Hay cuatro cosas que se deben observar. Siéntate en silencio y empieza por ver la respiración, por sentir la respiración. La prime­ra cosa es el aliento que entra. Después, cuando el aliento ha en­trado, se detiene un momento… es un momento muy breve, pero se detiene una fracción de segundo; esa es la segunda cosa que hay que observar. Después, el aliento da la vuelta y sale; esa es la tercera cosa que hay que observar. Y una vez más, cuando el aliento ha salido del todo, se detiene durante una fracción de segundo; esa es la cuarta cosa que hay que observar. Entonces, el aliento empieza a entrar de nuevo… ese es el círculo de la respiración. Si puedes observar estos cuatro aspectos, quedarás sorprendido, asombrado del milagro de un proceso tan simple… porque la mente no interviene.
Observar no es una cualidad de la mente. Observar es la cuali­dad del alma, de la conciencia. Observar no es un proceso mental en absoluto. Cuando observas, la mente se detiene, deja de existir. Al principio te distraerás muchas veces y la mente entrará y em­pezará a divagar, saltar de un pensamiento a otro, jugar a sus  juegos de siempre. Pero cuando percibas que te has distraído, no hay necesidad de sentirse culpable o arrepenti­do… simplemente, reanuda la observación, vuelve a observar una y otra vez tu respiración. Poco a poco, poco a poco, la mente interfe­rirá cada vez menos.
Se dice que cuando seas capaz de observar tu respiración durante cuaren­ta y ocho minutos seguidos, quedarás iluminado. Esto te va a sor­prender. ¿Solo cuarenta y ocho minutos? Porque te parece que no es muy difícil… ¡solo cuarenta y ocho minutos! Pues es muy difícil.
En solo cuarenta y ocho segundos, caerás muchas veces víctima de la mente. Inténtalo con un reloj delante; al principio no podrás mantenerte vigilante ni sesenta segundos. En solo sesenta segun­dos, en un minuto, caerás dormido muchas veces. Te olvidarás de observar… la observación y la vigilancia quedarán olvidadas. Alguna idea te llevará lejos, muy lejos. Y de pronto te darás cuenta… mira­rás el reloj y verás que han pasado diez segundos. Durante diez se­gundos no estuviste vigilando.
Pero poco a poco, poco a poco… es cuestión de tino; no es cuestión de práctica, sino de tino… poco a poco lo irás absorbiendo. Porque esos pocos momentos en los que estás vigilante son de una belleza tan exquisita, de una alegría tan tremenda, que una vez que hayas saboreado esos pocos momentos querrás volver una y otra vez… sin más motivo que por el gozo de estar ahí, presente ante la respiración.
No es el mismo proceso que hacemos en el yoga. En el yoga, el proceso se llama pranayam; es un proceso completamente diferente. En el pranayam haces aspiraciones profundas, te -llenas el pecho con todo el aire posible, absorbiendo cada vez más oxígeno; después vacías los pulmones todo lo posible, expulsando todo el dióxido de carbono. Es un ejercicio físico… es bueno para el cuerpo, y para la mente, pero distinto de vipassana.
En el vipassana no tienes que cambiar el ritmo de tu respiración natural. No tienes que hacer  inhalaciones largas y profundas; no tienes que exhalar de manera diferente de la normal. Deja que sea absolutamente normal y natural. Toda tu conciencia tiene que es­tar en un punto, observando.
Y si puedes observar tu respiración, también puedes empezar a observar otras cosas. Al andar puedes observar que estás andando, al comer puedes observar que estás comiendo. Y por fin llega un momento en el que puedes observar que estás dormido. El día en que puedas observar que estás dormido quizás te observes tambien transportado a otro mundo. El cuerpo sigue durmiendo, y dentro sigue ardiendo una luz brillante. Tu vigilancia se mantiene sin perturbaciones. Durante las veinticuatro horas del día habrá una corriente subterránea de vigilancia. Tú sigues haciendo cosas… para el mundo exterior, nada ha cambiado, pero para ti ha cambiado todo.

sábado, 5 de abril de 2014

Vivir el presente.



Cuenta una historia que el sabio Confucio animó a uno de sus discípulos a caminar por el bosque.

Mientras el maestro paseaba distraídamente, silvando y observando los árboles y los pajáros con los que iba cruzándose por el camino, su acompañante parecía nervioso e inquieto. No tenía ni idea de adónde se dirigían.

Harto de esperar, finalmente el discípulo rompió susilencio y le preguntó: “¿A dónde vamos?”.

Y Confucio, con una amable sonrisa en su rostro, le contestó: “Ya estamos”.

jueves, 3 de abril de 2014

Meditación de la uva pasa.

Cuantas veces hemos escuchado la frase: "Comer es un placer" ¡Muchas! Y así debe ser; sentarse a saborear una buena cena es algo que realmente se puede disfrutar mucho.

Los franceses son conocidos por disfrutar del buen vino, buen queso, buena comida, pero se dice que los franceses mantienen un buen régimen y buena figura por la actitud que tienen hacia la comida. Este modo se basa en un utilizar buenos ingredientes, y comer con moderación pero sobre todo disfrutando de cada bocado.

Muchas veces comemos rápidamente, porque creemos tener cosas que hacer. Aprovechamos el momento de la comida para ver la televisión, leer, ver el e-mail, facebook, washap...
Hacemos de todo mientras comemos excepto ralamente saborear y prestar atención al acto de comer. Y así nos estamos perdiendo un gran placer y no somos conscientes de la gran cantidad de alimentos que deglutimos sin notarlo.
  ¿Estamos disfrutando de uno de los actos más importantes de nuestras vidas que es nutrirnos, alimentarnos sin el que no pedriamos vivir ?

Esto me recuerda la meditación de la uva pasa. La describe John Kabat-Zinn uno de los mayores expertos en mindfulness del mundo; el primer ejercicio de meditación que enseña a sus pacientes es el de la uva pasa. El hecho de que prestemos atención, literalmente nos despierta y nos hace ver como muchas veces realizamos las cosas mecánicamente. Tener conciencia de lo que hacemos es la practica esencial de la meditación plena.

Es así de fácil:


  • Coge una uva pasa.
  • Presta atención plena a la fruta. 
  • Ponla en la palma de la mano, obsérvala con cuidado, ¿ como huele ? nota el color, sus arrugas .
  •  Hazte consciente de cualquier pensamiento que pase por la  cabeza, de comida o de imágenes que te evocan  su olor. 
  • Tócala ¿ que tacto tiene ? Hazla rodar entre tus dedos  ¿ Que notas ?, Apriétala un poco ¿ Que sucede ?.
  •  Ahora, siendo consientes del lento, lentísimo, movimiento de la mano al acercar el alimento a la boca, pon  la uva pasa en los labios, pásala por ellos, casi sin rozarlos  ¿ como notas su piel en los labios ? . 
  • Pon la uva dentro de nuestra boca, siéntela  en la lengua,  ahora mastica muy despacio, experimentando  realmente el acto de masticar una sola uva pasa.  Un  mar de fragancias y sabores llena el paladar, ¿ como son ?disfruta cada segundo.
  • Cuando esta lista para tragar presta atención al proceso , intenta sentir como pasa por la garganta y recorre el camino hacía el estómago. 


Aunque no te gusten mucho las uvas pasa, esta experiencia fascinante. Nunca habrás saboreado y esperado tanto para tragar un pedazo de comida, el inmenso placer de hacer un acto plenamente consciente.
No sólo disfrutaremos de la comida, sino que comeremos mejor, y tendremos muchos menos problemas con nuestro sistema digestivo. Nos daremos cuenta poco a poco que poniendo plena atención al acto de comer con placer, comeremos menos y lo disfrutaremos más. Te animo a que lo pruebes, con la uva pasa y con cualquier otro alimento, disfrutaras  intensamente de la meditación.


martes, 1 de abril de 2014

Dios y su creación

Los hindúes han creado una encantadora imagen para describir la relación entre Dios y su Creación. Dios «danza» su Creación. El es su bailarín; su Creación es la danza. La danza es diferente del bailarín; y, sin embargo, no tiene existencia posible con independencia de El. No es algo que se pueda encerrar en una caja y llevárselo a casa. En el momento en que el bailarín se detiene, la danza deja de existir.En su búsqueda de Dios, el hombre piensa demasiado, reflexiona demasiado, habla demasiado. Incluso cuando contempla esta danza que llamamos Creación, está todo el tiempo pensando, hablando (consigo mismo o con los demás), reflexionando, analizando, filosofando. Palabras, palabras, palabras… Ruido, ruido, ruido… Guarda silencio y mira la danza. Sencillamente, mira: una estrella, una flor, una hoja marchita, un pájaro, una piedra… Cualquier fragmento de la danza sirve. Mira. Escucha. Huele. Toca. Saborea. Y seguramente no tardarás en verle a él, al Bailarín en persona.   Si realmente has oído cantar a un pájaro, si realmente has visto un árbol…, deberías saber (más allá de las palabras y los conceptos). ¿Qué dices? ¿Que has oído cantar a docenas de pájaros y has visto centenares de árboles? Ya. Pero lo que has visto ¿era el árbol o su descripción? Cuando miras un árbol y ves un árbol, no has visto realmente el árbol. Cuando miras un árbol y ves un milagro, entonces, por fin, has visto un árbol. ¿Alguna vez tu corazón se ha llenado de muda admiración cuando has oído el canto de un pájaro?